
Tiempos de torbellinos y tormentas
de lluvias y algunos soles.
La suerte estaba de tu lado,
pero no te avisó.
Una espesa negrura nos acecha
nos envuelve,
las sonrisas se apagan,
caricias frías, palabras sin amor,
ojos bien cerrados.
Somos huéspedes de esa negrura.
Y así siempre, y así todo...